Atención automática que no suena a robot
Lo peor de los chatbots para empresas es que parecen… bueno, robots.
Nosotros montamos chatbot WhatsApp que conversan como humanos, entienden contexto y resuelven sin que notes que es automático.
- Responde en segundos — Filtra a los que solo miran y atiende a los que compran
- Califica a tu audiencia — Sabe quién es cliente y quién solo está mirando el precio
- Clasifica por canales fiables — Tu chatbot para empresas trabaja en WhatsApp, web o donde estés
- Mensajes con tono humano — cercanos, claros y en buen español.
- Agenda citas automáticamente — Sincro directo con tu calendario. Cero vaivén de mensajes
*Todo con tono humano y reglas claras de derivación.
CÓMO TE AYUDA
Lo que soluciona desde el día uno
Un chatbot para empresas bien montado no es un juguete tecnológico. Es tu equipo de atención trabajando 24/7 sin cansarse, sin pedir vacaciones y sin cobrar extra por nocturnidad.
Te libera de estar contestando lo mismo 40 veces al día («¿cuánto cuesta?», «¿tienen disponibilidad?», «¿dónde están?»). Y encima lo hace mejor que tú porque no se distrae, no se enfada y siempre responde en 3 segundos.
El chatbot WhatsApp filtra, califica y te pasa solo los clientes que de verdad están listos para comprar. El resto lo gestiona él.
Derivación inteligente cuando de verdad hace falta
El chatbot para empresas sabe cuándo puede resolver solo y cuándo necesitas entrar tú. No se inventa respuestas. Si detecta algo complejo, urgente o fuera de guion, te avisa o deriva la conversación a humano.
Así no pierdes ventas por un bot terco que no sabe cuándo parar. Y tú solo intervienes donde de verdad hace falta tu experiencia. El resto, lo gestiona el chatbot WhatsApp automáticamente.
Qué incluye
Qué montamos en 30 días
En un mes tu chatbot para empresas está atendiendo, agendando y filtrando. Así:
FAQs y tono
Montamos las respuestas a las preguntas que te hacen una y otra vez. Pero no como un diccionario aburrido de «pregunta-respuesta-pregunta-respuesta». Lo hacemos con tu tono, tu personalidad y la forma en que TÚ las responderías si tuvieras tiempo infinito y paciencia de monje.
Cubrimos desde lo obvio («¿dónde están?», «¿cuánto cuesta?») hasta lo específico de tu negocio. Y le damos opciones para que no repita como loro: tres formas distintas de decir lo mismo, para que las conversaciones se sientan naturales aunque sea la consulta número 200 del mes.
El objetivo es simple: que la gente no note que está hablando con un chatbot para empresas hasta que sea demasiado tarde para importarles. Porque ya tienen su cita agendada y están contentos con la atención.
Flujos de reservas
Diseñamos los flujos clave —reservar, cambiar y cancelar— con acuse y confirmación para que nada quede en el aire. Porque el «ya te confirmo» que nunca llega es la forma más rápida de perder un cliente que ya estaba casi dentro.
Probamos casos borde que a todos se nos olvidan: dobles reservas, reprogramaciones seguidas, clientes que cancelan 10 minutos antes, gente que pregunta disponibilidad sin querer reservar aún. Documentamos qué hace el chatbot WhatsApp en cada escenario y cuándo necesita derivarlo sin fricción a una persona real.
El resultado es un sistema que agenda sin tu intervención el 80% de las veces. Y cuando no puede, te pasa el testigo con toda la info necesaria para que tú cierres en dos mensajes. Nada de empezar desde cero preguntando lo mismo que ya preguntó el bot.
Incidencias y avisos
El chatbot para empresas no solo agenda y responde: también te avisa cuando algo se sale del guion. Cancelaciones de última hora, dobles reservas que se colaron, clientes que no responden a la confirmación, preguntas raras que no tiene programadas… todo lo que necesitas saber para actuar rápido, te llega a tu panel o por notificación directa.
Y luego están los recordatorios automáticos, que son oro puro para reducir plantones. El chatbot WhatsApp avisa 24 horas antes («Tu cita es mañana a las 15h, ¿confirmamos?»), vuelve a recordar el mismo día si hace falta, y hasta puede hacer seguimiento post-cita si quieres feedback o generar recurrencia.
La gente olvida. No es personal, es la vida moderna. Pero con recordatorios automáticos, los no-shows bajan entre un 30-50%. Menos huecos perdidos, más calendario aprovechado, más ventas al final del mes.
Conexión y panel
Tu chatbot WhatsApp no vive en una burbuja. Se conecta con tu calendario (Google Calendar, Outlook, Calendly…), tu CRM (si usas uno), tu sistema de pagos, tus hojas de cálculo donde llevas el control… Lo que necesites que hable con lo demás, lo conectamos.
Porque un chatbot para empresas que no se integra con tus herramientas es básicamente un empleado nuevo que trabaja con su propio Excel y nunca comparte información. Bonito, pero inútil. Aquí todo tiene que estar sincronizado para que no estés haciendo doble trabajo ni perdiendo datos por el camino.
Y todo lo ves desde un panel simple que no necesita manual de usuario. Cuántas conversaciones atendió hoy, cuántas citas agendó esta semana, qué preguntas están apareciendo más (útil para detectar huecos en tu comunicación), cuántos derivó a humano y por qué.
Lo que nos diferencia
Por qué elegir Estudio Bambú
Lenguaje natural, no guiones robóticos.
Nada de "presiona 1 para hablar con ventas". Montamos chatbots para empresas que hablan como tú: con tu tono, tu personalidad y respuestas que no suenan a manual. Porque un chatbot WhatsApp que parece humano vende más que uno que parece máquina.
Derivación inteligente, no caos.
Le enseñamos a tu chatbot para empresas cuándo puede resolver solo y cuándo pasar a persona. Sin repetir preguntas, sin perder contexto. Tú entras solo cuando hace falta, no cada vez que alguien pregunta "¿dónde están?".
Panel claro, sin complicaciones.
Ves lo que importa: conversaciones cerradas, citas agendadas, incidencias que necesitan tu ojo. Sin dashboards que parecen cabina de avión. Tu chatbot WhatsApp trabaja, tú decides con datos simples.
Indicadores de referencia
Los números que importan
Orientativos, no promesas. Los revisamos contigo cada mes.
< 60 s
Tiempo de respuesta promedio
Mientras tú tardas 15 minutos en ver el mensaje, el chatbot WhatsApp ya resolvió, agendó y confirmó. Velocidad = menos clientes que se van a la competencia.
70–90%
De las consultas resueltas sin intervención
8 de cada 10 conversaciones las cierra el chatbot para empresas solo. Tú solo intervienes en lo que de verdad necesita tu atención. Lo demás, lo hace él.
30–50%
Reducción en citas no presentadas
Recordatorios automáticos que funcionan. El chatbot WhatsApp avisa, confirma y reconfirma. Menos huecos perdidos en tu agenda.
Valores orientativos basados en implantaciones recientes. No constituyen promesa de resultados.
PREGUNTAS FRECUENTES
Lo esencial antes de empezar
Antes de montar tu chatbot para empresas, estas son las 4 cosas que más preocupan (y sus respuestas directas):
No sustituye, complementa. El chatbot WhatsApp filtra, califica y agenda. Las llamadas complejas o ventas grandes siguen siendo tuyas. Pero el 70% de «¿cuánto cuesta?» y «¿dónde están?» lo resuelve él. Así llegas a las llamadas importantes sin estar quemado de repetir lo mismo.
Le enseñamos cuándo derivar. Si alguien pregunta algo fuera de guion, el chatbot para empresas te avisa o pasa la conversación a humano. No se inventa respuestas. Si no sabe, escala. Simple.
Sí. Usamos tu tono, tus respuestas reales, hasta tus imágenes o PDFs. El chatbot WhatsApp no suena genérico porque lo entrenamos con tu forma de comunicar. Es tu voz, en automático.
Ese es el objetivo. Nada de «Hola, soy un asistente virtual«. Le damos personalidad, empatía y naturalidad. La gente no debería notar que están hablando con un chatbot para empresas hasta que tú se lo digas (o hasta que nunca se lo digas).